De la resolución a la realidad: Cinco hábitos respetuosos con la Tierra que puedes empezar hoy y continuar de por vida
Reciba el año nuevo con propósitos tangibles y sostenibles que siembren las semillas de un futuro respetuoso con la Tierra.
Con el nuevo año llega la promesa de un nuevo comienzo, y no hay mejor momento para comprometerse con nuevos hábitos que protejan el planeta. Aunque adoptar nuevas prácticas sostenibles puede resultar desalentador, hemos elaborado una lista de cinco propósitos realistas que puedes empezar hoy mismo y mantener de por vida. Desde consejos para hacer compost en casa hasta para hacer compras sostenibles, te invitamos a que tomes tu propósito favorito de esta lista y lo conviertas en un nuevo hábito que tendrá efectos positivos en los años venideros.
Mientras lees este artículo y te sumerges en nuevos hábitos sostenibles, te animamos a que compartas tus conocimientos y métodos con tus amigos, familiares, vecinos y seguidores. Usted tiene el poder de generar un efecto dominó de cambio positivo en su comunidad, y compartir su viaje es una de las mejores maneras de inspirar a otros a unirse al movimiento.
FAMILIARÍCESE CON LAS DIRECTRICES LOCALES SOBRE RECICLAJE.
Admitámoslo, reciclar puede ser confuso. Con normas y reglamentos que varían según el país, el estado y la ciudad, puede ser difícil estar al tanto de todo. ¿Lo estás haciendo bien? ¿Puedes reciclar el tapón de plástico con la botella? ¿Hay que separarlos? ¿Puedes incluir la bolsa de basura de plástico con el reciclaje? Si te equivocas, ¿todo tu esfuerzo de reciclaje se va al garete? Pues bien, estamos aquí para poner las cosas en su sitio.
Lo primero es lo primero: reciclar sigue siendo tan importante como siempre. Aunque requiere esfuerzo e intención, merece la pena. Project Drawdown, el principal recurso mundial para soluciones climáticas, calcula que el reciclaje reducirá las emisiones de CO2 hasta en seis gigatoneladas entre 2020 y 2050. Eso equivale a retirar más de mil millones de coches de la carretera durante un año.
Ahora bien, ¿por qué hay tantas normas? Las distintas instalaciones de reciclaje pueden tratar distintos artículos en función de su equipamiento. La razón por la que no se pueden reciclar bolsas de plástico del supermercado, bolsas de basura o artículos contaminados (como un frasco de mantequilla de cacahuete sucio o una caja de pizza grasienta) es que pueden contaminar los otros artículos o dañar la maquinaria de reciclaje. Por eso es tan importante conocer bien los requisitos de reciclaje de su zona. A continuación le explicamos cómo hacerlo.
- Reduzca y reutilice primero. Te animamos a que veas los residuos y el reciclaje como el último recurso, para que puedas descubrir nuevas oportunidades de reciclar tus objetos. Ya sea reutilizando tarros de salsa para pasta como jarrones para flores o reutilizando las bolsas de la compra en el supermercado, usa tu creatividad para reciclar antes de recurrir al reciclaje.
- Encuentre su centro. Cuando se trata de reciclar artículos cotidianos, puede empezar por buscar "mi planta de reciclaje" para encontrar su planta específica y lo que aceptan. Te recomendamos que imprimas las directrices de tu centro y las guardes cerca del contenedor de reciclaje.
- Identifique los plásticos reciclables (por tipo o número). Muchas instalaciones dirán "botellas y envases de plástico nº 1 y nº 2". Asegúrese de identificar qué tipos de plásticos acepta su instalación local.
- Sepa qué tipos de vidrio son aceptables, si los hay. Muchas instalaciones no aceptan vidrio porque puede dañar a los empleados y el equipo. Si aceptan vidrio, suele tratarse de un tipo específico que figura en el sitio web de su centro local.
- Retire las partes no reciclables. A menos que se indique explícitamente, es probable que su centro no acepte tapas, tapones, envoltorios, forros, insertos o elementos similares que vengan adheridos al artículo reciclable.
- No hagas suposiciones. Si no está seguro sobre un artículo, póngase en contacto con su centro local. Algunos artículos pueden parecer aceptables (como un vaso de café de papel) cuando en realidad no son reciclables.
- Límpialo todo. Si el artículo es un envase alimentario (o ha estado en contacto con alimentos) asegúrese de que está limpio antes de enviarlo al centro, o puede contaminar otros artículos.
- No lo embolses. Las bolsas de plástico (como las de la compra o la basura) pueden provocar atascos en la maquinaria de reciclaje.
A medida que descubra los requisitos y métodos de reciclaje locales, asegúrese de maximizar su impacto compartiendo sus nuevos conocimientos para conseguir que sus vecinos se sumen a la iniciativa.
ES TOMILLO CULTIVAR TUS PROPIAS HIERBAS.
Las hierbas que encuentras en el supermercado vienen de todas partes del mundo (a menudo dentro de envases de plástico). Como muchos otros comestibles, se necesita mucho tiempo y transporte para llevarlas de la fuente a tus manos. Y una vez cosechadas, las hierbas empiezan a perder su valor nutritivo.
¿La buena noticia? Hay una respuesta sencilla a todo esto: puedes cultivar fácilmente tus propias hierbas.
Tanto si tienes una casa grande como un espacio pequeño, puedes cultivar hierbas aromáticas en casa durante todo el año. Todo lo que necesitas es un pequeño balcón, puerta o alféizar y un poco de sol y agua. Lo más importante es acordarse de cosechar las hierbas a medida que crecen.
Este Reel te cuenta todo lo que necesitas saber para empezar tu propio mini huerto de hierbas aromáticas en la puerta de casa, el patio o el balcón. Si vas a cultivar tus hierbas en el interior, puedes seguir esta guía que explica qué tipos de hierbas elegir y cómo cuidarlas en interiores. También hay que tener en cuenta que los suelos convencionales, no orgánicos, sólo contienen entre un 2 y un 4% de materia orgánica, por lo que optar por un suelo orgánico puede producir hierbas más densas en nutrientes. En este artículo se describen cuatro tierras orgánicas perfectas para tu jardín de hierbas aromáticas y algunos aspectos clave que debes tener en cuenta (como ingredientes específicos) cuando compres tierra en tu tienda habitual.
Con la tierra, los cuidados y las condiciones adecuadas, tus hierbas de interior acabarán superando el tamaño de sus recipientes y podrás transportarlas a macetas más grandes para cultivarlas en el exterior en los meses más cálidos. Si no tienes espacio al aire libre, ¡puedes regalárselas a un amigo que sí lo tenga!
Nota: Mientras cultivas tu pulgar verde, recuerda que utilizar una regadera y explorar la recogida de agua de lluvia puede reducir tu consumo de agua. Puedes seguir reduciendo tu consumo de agua solucionando las fugas de tu casa y tomando duchas más cortas.
COMPROMETERSE CON EL COMPOSTAJE.
El compostaje tiene muchas ventajas. Al reutilizar la materia orgánica, puede mejorar la salud y la estructura del suelo, atraer organismos beneficiosos a la tierra, reducir la necesidad de fertilizantes y pesticidas y disminuir las emisiones de metano de los vertederos. Sólo en Estados Unidos, el desperdicio de alimentos genera alrededor del 58% de las emisiones de metano de los vertederos, por lo que el compostaje generalizado puede reducir drásticamente esta cifra.
Mucha gente cree que el compostaje requiere un jardín, un gran contenedor, un clima cálido y muchos conocimientos. La verdad es que hay muchas opciones en lo que respecta al compostaje. Puede instalar un compostador en su casa sin necesidad de conocimientos especializados, independientemente de la estación del año. Aquí tienes algunos consejos y recursos para empezar.
- Busca opciones de compostaje en tu ciudad. Si vives en una zona urbana, ésta puede ser la solución más sencilla. Intenta buscar "[nombre de la ciudad] programa de compostaje" para ver si tu ciudad ofrece soluciones sencillas. Si no es así, puedes buscar "compostaje cerca de mí" para encontrar empresas independientes (huertos locales, agricultores, etc.) que ofrezcan servicios de recogida, entrega, orientación, etc.
- Prueba el microcompostaje de interior. Puedes encontrar pequeños cubos de compostaje autónomos que caben debajo de tu fregadero. Con este método, puedes utilizar el compost para nutrir la tierra de tu propio jardín o depositarlo en una instalación local o negocio independiente.
En nuestra entrevista con Paige Sullivan, Vicepresidenta de Éxito de Clientes Copia, también puede encontrar consejos y perspectivas tangibles que le ayudarán a reducir el desperdicio de alimentos en su hogar.
HAZ INVENTARIO DE TUS HÁBITOS DE COMPRA.
Vivimos en un mundo en el que se pueden hacer compras con unos pocos clics, pero esta experiencia sin esfuerzo ha tenido graves repercusiones en el medio ambiente. Las compras en línea basadas en las tendencias han impulsado la moda rápida, lo que ha dado lugar a condiciones de trabajo poco éticas, al uso de materiales tóxicos y a un aumento de la contaminación mundial en toda la cadena de suministro.
Para evitar contribuir a ello, le invitamos a que empiece por hacer inventario de sus hábitos de compra. ¿Pides por Internet cosas que podrías recoger fácilmente cerca de casa? ¿Actúa en el momento en lugar de pensar en la verdadera necesidad y el ciclo de vida de su compra?
Para acabar con estos hábitos, puedes establecer nuevos sistemas que reduzcan las compras impulsivas o insostenibles. Tu sistema podría consistir en nuevos hábitos sostenibles como:
- Hacer listas de deseos en lugar de comprar inmediatamente
- Buscar productos alternativos fabricados localmente
- Explore aplicaciones de compra como Good On You, que clasifican y organizan las empresas éticas, para que pueda buscar marcas que se alineen con sus valores.
- Documentar tus conjuntos para entender mejor tu estilo y saber cuándo estás siendo "influenciada" frente a hacer una compra alineada (que trascienda las modas).
Todas estas cosas pueden ayudarte a evitar las compras impulsivas y a cultivar una mayor intención en torno a tus compras, lo que puede tener efectos positivos duraderos en el planeta.
EMPIEZA CON UNA "OPORTUNIDAD DE INTERCAMBIO" SOSTENIBLE.
Sustituir un solo artículo desechable en su hogar puede tener un impacto positivo significativo en el planeta. Estos artículos no solo se acumulan con el tiempo, sino que cuando los cambias con éxito por un artículo más sostenible, puede servirte de inspiración para hacer lo mismo con otros productos de tu casa.
A la hora de cambiar artículos insostenibles, piensa en los que más utilizas. ¿Acabas con las toallitas de papel en la cocina? ¿Tiras innumerables bolsas de plástico? Tú eres el que mejor te conoces, pero para que puedas empezar, hemos incluido a continuación algunos artículos y cambios comunes.
- Toallas de papel: La EPA estimó que los estadounidenses tiraron 3,8 millones de toneladas de toallas de papel y papel tisú en 2018. Para evitar contribuir a esto, recomendamos cambiar los productos de papel desechables por toallas de tela que puedas tirar con tu colada habitual.
- Esponjas: Las esponjas convencionales suelen estar fabricadas con fibras de plástico sintético que pueden entrar en el medio ambiente al irse por el desagüe o depositarse en vertederos. Como muchos plásticos, pueden tardar cientos de años en descomponerse. En lugar de una esponja de plástico, opta por una esponja sostenible fabricada con fibras vegetales o un paño de cocina ecológico.
- Bolsas de plástico: En lugar de bolsas de plástico, invierte en bolsas de silicona infinitamente reutilizables. Stasher es una marca popular con muchos diseños diferentes para diversas necesidades.
- Pastillas para la colada y el lavavajillas: En lugar de utilizar pastillas de plástico (que se descomponen y se disuelven en la ropa y la vajilla), prueba a utilizar pastillas o líquidos elaborados con materiales naturales. Hay muchas pastillas para lavavajillas y ropa sin plástico que son mejores para ti y para el planeta.
- Cepillos de dientes: Cada año, unos 30.000 millones de cepillos de dientes acaban en los vertederos de todo el mundo. Para combatirlo directamente, recomendamos cambiar a un cepillo de dientes biodegradable de bambú.
- Bombillas LED: cambiar los fluorescentes por bombillas LED puede reducir drásticamente el consumo de energía en tu hogar, ya que las bombillas LED requieren mucha menos potencia que los fluorescentes y convierten el 95% de su energía en luz (desperdiciando sólo el 5% en forma de calor). Para seguir ahorrando energía en tu hogar, te recomendamos que realices una auditoría energética, desenchufes los aparatos electrónicos cuando no los utilices y no te pases con el termostato (utiliza mantas o abre las ventanas según el tiempo que haga).
Hay muchos más artículos que podrías añadir a esta lista, así que asegúrate de estar atento a los intercambios fáciles en cada habitación de tu casa.
